Rodrigo Vicente

Ahora que se viene la crisis, es un buen momento para ponerse más creativo y tratar de ser eficientes en lo que uno hace”

A sus 39 años, Rodrigo ha revolucionado el mercado de bebidas de hidratación en Bolivia: “Comenzamos a crear una nueva marca donde existían big players y a posicionarnos dentro de las mejores marcas de rehidratantes”, nos dice orgulloso y agrega: “Uno de los principales logros que se ve en los emprendedores bolivianos es que tenemos calidad para ser exportables a cualquier país del mundo. El problema es que en Bolivia existe muchos obstáculos para poder ser competitivos y es por eso que el camino al éxito es mucho mas difícil. Ahora que se viene la crisis, es un buen momento para ponerse más creativo y tratar de ser eficientes en lo que uno hace”.

Para este joven emprendedor que se destaca entre muchos de su generación, uno de los principales desafíos en el futuro, es la penetración de su producto en LATAM, pero también reconoce los aportes de su empresa al desarrollo del país: “Como Sante creamos muchos trabajos directos e indirectos. Hacemos que se venda nuestro producto en muchos puntos del país y eso genera movimiento económico. Además, buscamos innovar con propuestas que reflejen nuestra identidad y cultura de ser parte de un producto HECHO EN BOLIVIA con una excelente calidad. Los emprendedores bolivianos tenemos un papel importante en la proyección nacional e internacional de Bolivia, ya que impulsamos la economía, generamos empleo y promovemos la innovación. Por otra parte, difundimos la identidad y creatividad del país a través de productos y marcas que reflejan nuestra cultura, mostrando una imagen moderna y competitiva de Bolivia ante el mundo”.

Finalmente nos deja un importante mensaje: “El camino al éxito consiste en la persistencia, muchas veces es más fácil fracasar y tirar la toalla. Hay que reconocer los errores en el transcurso de cualquier emprendimiento, ya que uno aprende más de los errores que del éxito. Y lo mas importante de todo, dejen de tener miedo a emprender, porque quedarse con la duda seria el peor error del emprendedor”.